AUDIO FUTURA
Related Articles
La reciente liberación del cepo cambiario para personas físicas y la implementación de un sistema de flotación administrada por parte del Banco Central, con bandas de entre $1.000 y $1.400 para el dólar, reconfiguró el escenario económico nacional. Mientras el Gobierno busca generar confianza, atraer inversiones y estabilizar expectativas, la reacción de algunos sectores ya genera tensión, particularmente en el comercio minorista.
En San Juan, la Cámara de Comerciantes Unidos denunció aumentos especulativos en las nuevas listas de precios de productos importados. Según su titular, Marcelo Quiroga, algunos proveedores subieron entre un 10% y un 15% los valores de artículos como electrodomésticos, calzado y repuestos electrónicos, sin fundamentos claros.
“Los aumentos no tienen justificación, porque ya se venía operando con un dólar cercano a los $1.400”, señaló Quiroga. Además, advirtió que algunos distribuidores pospusieron entregas mientras esperan definiciones más claras del mercado.
Desde otra mirada, Hermes Rodríguez, presidente de la Cámara de Comercio de San Juan, fue más cauto:
“Hasta ahora no se han producido modificaciones en las listas de precios. Estamos atentos, pero no hemos visto movimientos relevantes”.
Ambos coincidieron en que el nivel de ventas sigue bajo y que el consumo se mantiene expectante. “La recuperación va a depender de que se genere confianza y estabilidad”, sostuvo Rodríguez.
A nivel nacional, varias cámaras empresarias prevén una fase de reacomodamiento con posibles distorsiones. Si bien desde el Ministerio de Economía no se anticiparon controles específicos, se habla de una fiscalización activa en sectores sensibles para evitar abusos.
Por ahora, la transición hacia la flotación del dólar plantea más preguntas que respuestas para los comerciantes, que observan con atención el comportamiento de proveedores, clientes y mercados.
